El ser humano puede hoy intervenir
en su propia evolución porque posee los medios para hacerlo. Se trata de no dejar
nada al azar y de anticiparse, tomando las riendas de aquello que le atañe en
todas las áreas posibles, intentando por encima de todo mantener la democracia,
impulsar la justicia social para que todos tengan acceso al progreso y evitar
los riesgos ligados al mismo: sanitarios, medio ambientales u otros.
Esto es lo que promulgan los
transhumanistas, que valoran el progreso en cuanto a que permite vivir más
tiempo y con más salud, incrementa las capacidades sensoriales, motrices y
cognitivas, permite ser feliz y más
empático y también reducir los riesgos que amenazan a la humanidad.
Los transhumanistas no buscan la
inmortalidad, sino la amortalidad, eso es, alargar la vida para poder llevar a
cabo todos los proyectos que no caben en un periodo de vida actual. Quieren
poder elegir el momento de su muerte.
Para conseguirlo se preparan para un tipo
de vida post humano (con capacidades mentales y físicas que superan las de
cualquier humano). ¿Cómo lo conseguirán? Con nanotecnología molecular,
ingeniería genética, inteligencia
artificial, terapias anti-envejecimiento, dispositivos neurológicos, vestimenta
computerizada…
¿Un ser humano cibernético? Tal
vez. ¡Adelante el tecnoprogreso!
(foto libre de www.foter.com)
¿Un ser humano cibernético?, nanotecnologia celular, ingenieria artificial, terapias, dispositivos, hasta vestimenta "ad hoc", ¿de verdad vale la pena todo esto?
ResponderEliminarPermíteme que recuerde una estrofa de "Los versos de la muerte" de Hélinand de Froidmont:
La muerte libera al esclavo
la muerte somete al Rey y al Papa
y paga a cada uno su salario,
y vuelve al pobre lo que pierde
y toma al rico lo que desperdicia.
Personalmente quiero ser humano, y solo humano frente a la muerte, recibirla con la mirada clara y el ànimo en calma, mirarla cara a cara y decirme: He vivido.
Para mí lo más importante es la libertad. En este caso la de poder elegir: humano o post-humano. Que cada cual decida.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Interesante y que hace pensar, se esté o no de acuerdo en todos los puntos. Y esa es una de las cosas que hoy hacen más falta. Pararse a pensar, reflexionar sabiendo que nadie tiene toda la razón.
ResponderEliminarCierto. Con la edad aprendemos que las verdades absolutas no existen. Todo depende del punto de vista, de la cultura... Lo importante es reflexionar.
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